A lo largo de mi desempeño como pasante de la
Practica Profesional nivel II, pude evidenciar que los conocimientos adquiridos
a lo largo de toda la carrera universitaria han sido solo una pequeña parte importante
para mi desarrollo como profesional de la educación, puesto que al momento de
experimentar cada circunstancia en el salón de clases comprobé que la vocación
y la motivación son requisitos fundamentales para cualquiera que se desenvuelva
como docente, ya que educar implica una responsabilidad que no cualquiera puede
asumir.
Un educador es aquel profesional que no solo se
dedica a propiciar situaciones que generen conocimientos, sino además se
encarga de guiar, orientar, apoyar e inspirar a todos los alumnos que estén
bajo su responsabilidad, por ende todo aquel que se dedica a enseñar debe tener
un testimonio ejemplar.
Gracias.